Agradezco profundamente a Dios por la oportunidad que
me permite de poder estudiar en el Seminario Todas las Naciones (STN), ya que
él ha puesto los medios necesarios para que mi preparación académica sea
posible, por lo cual elevo una oración de gratitud y alabanza a nuestro Señor.
Bendigo a Dios porque se ha revelado de forma personal a mi vida y es el que da
sentido a nuestro ministerio. Dios en su misericordia me ha conducido a servirle y se ha
manifestado de muchas maneras en las situaciones que a lo largo de la vida se han
presentado.
Toda la Gloria sea
para Dios, ruego que sean multiplicados sus esfuerzos. Deseo también
compartirles que he experimentado un radical cambio en mi manera de ver
la historia de la Iglesia y también en mi manera de estudiar y compartir la
Palabra de Dios.
Por medio carta saludo a las personas que van a leerán esta acción de gracias, en la cual
cuento mi experiencia como prueba de que Dios no solo nos está capacitando para hablar o
ensenar a otros, sino que primero lo hace a nuestras vidas.
Quiero comenzar este mensaje agradeciendo al Señor por la bendición que
recibo cada mes para continuar estudiando en el seminario. En cada clase del
seminario he podido conocer del amor, la misericordia, la justicia y el poder del
Señor Jesucristo.
El hecho de estar empapándome de la Palabra de Dios durante mi estancia en el
seminario me ha permitido afrontar más las cosas a la manera de Dios. Cambiar mi perspectiva y
ver las cosas más en su perspectiva.
Para mi este semestre ha sido uno de los semestres más retadores, se presentaron en mi vida ciertas situaciones que me llegaron a hacer reflexionar sobre como Dios nos enseña a través de las pruebas.
Estoy agradecido con el seminario por seguir dándome la oportunidad de seguir
preparándome para el ministerio de Dios, y doy gracias en particular por las oraciones y por
el apoyo que se me da en todos los aspectos, tanto para mi crecimiento en el ministerio
como en mi crecimiento personal y espiritual.
Les saludo con la Paz de Cristo. Quiero comentar un poco de lo que he aprendido,
creo que tenía muchas ideas erróneas en cuanto la forma de predicar o hablar de la Palabra
de Dios. Cada materia que he pasado en el Seminario Todas las Naciones me ayudado
mucho en ir viendo la vida de otra manera.
n esta ocasión me alegro del
poder darles a conocer un testimonio de agradecimiento y alabanza a Dios, porque es quien
ha sido siempre fiel con todos en muchos aspectos, doy gracias a Dios por el corazón
alegre de cada donador que ha brindado lo que Dios les ha dado para edificación de muchos
y entre ellos yo también he sido bendecida.