Brenda Janette
De verdad, un agradecimiento o una carta no basta para expresar cuan agradecida
estoy con el Señor por sus vidas, por su disposición para ayudarme con los gastos de la
carrera
De verdad, un agradecimiento o una carta no basta para expresar cuan agradecida
estoy con el Señor por sus vidas, por su disposición para ayudarme con los gastos de la
carrera
El presente testimonio es para dar a conocer la manera en que estoy agradecida con
Dios y con ustedes como donadores por ayudar a que nosotros como estudiantes del
seminario logremos continuar con la preparación ministerial.
También no quiero dejar de alabar al Señor por los Hermanos y Hermanas que
generosamente ofrendan y apoyan nuestra formación en el Seminario,
¡Estoy muy agradecida con el seminario, mis
profesores, mis compañeros y definitivamente con ustedes por todo el apoyo que nos
están dando para llevar a cabo el llamado de Dios!.
n el seminario presencial aprendí mucho del escrutinio Escritural, pero, sobre todo,
aprendí a vivir en comunidad (que no siempre es fácil), a compartir lo poco que tengo, avalorar la amistad de quien la brinda.
Quiero compartirles que, para mí, el estarme preparando dentro del Seminario Todas las
Naciones, ha sido de gran bendición para mi vida, pues puedo asegurarle que no soy la
misma gracias a Cristo que ha estado puliéndome y transformándome en todas aquellas
cosas que no serán de utilidad para el ministerio que Dios
Agradezco primeramente a Dios por la oportunidad de estar preparándome en el
Seminario Todas las Naciones, de la misma manera a todos mis hermanos que
contribuyen económicamente en el apoyo de becas para los estudiantes del seminario.
Agradezco al Señor por permitirme estudiar un semestre más,
concluyendo con mayor formación y retos personales, familiares y en el ministerio,
pero también con más herramientas para desempeñar mi servicio a los hermanos
de la iglesia, siendo edificados como casa espiritual.
Primeramente, agradezco a Dios porque me permite seguir preparándome en el
Seminario Todas las Naciones, sin lugar a duda este año ha sido muy difícil de muchas
maneras, una pandemia que nos ha afectado de muchas maneras, familiares y hermanos en
la fe muy queridos han partido con el Señor en los últimos meses.
En este tiempo he vivido algunos desafíos familiares, laborales y
ministeriales, pero sé que no estoy solo, la presencia de Dios está conmigo
manifestado en las oraciones y apoyos que ustedes hermanos realizan, espero
algún día poder regresar tantas bendiciones recibidas.